El bostezo de mi calma evidencia el cansancio de largas esperas, nunca avisadas de antemano. Me tomó por sorpresa el apego a tu conjunto de órganos perfectamente organizados para hacerme sentir extrañamente especial. Se llenó de suspiros el instante agonizante en tu decisión de salvarme de este mundo, pero igual te quiero esperar. Cuando no existías te inventé en secreto, ahora esta realidad te envuelve con un moño púrpura, todo para mí .-
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