Tomo aire .-

Porque yo siento que no hay aire para que yo respire, mas que el de él... su oxígeno perfumado, algunas veces agitado de agotado, perseguido, vano, vago... en letargo. Yo no quiero respirar otro aire, no quiero otro, no quiero a otro... ni pensarlo, asi me marchito, tibia me enfrío... quiero renovar nuestro oxígeno, nuestro aroma a fresías, nuestra nube, nuestra escencia. Yo sin él no soy, él sin mi... no deja de ser hermoso, pero yo estoy acá para levantarlo, estoy, estoy, estoy... y voy a estar siempre... tan convencida que , aunque él no quiera, no me quiera, no me sienta... insisto ahora, insisto siempre... y así. Y me muerdo los labios, la boca, la cabeza, el cuerpo entero de un bocado lo muerdo... porque no puedo explicar, no puedo gritar, no puedo ,no puedo, no puedo hacerle saber que lo amo como nunca amé, como nunca sentí, como nunca jamás re nunca había divisado en el horizonte, en el pasto, el campo o en estos malditos edificios y el puto smog... pero no, hoy nada me emputece o encabrona más que las tontas palabras que se dejan escapar en un instante que al final terminamos odiando y pensando estúpido, cada vez más estúpido. Nada me ata más que el hecho de controlar mis actos, que jamás traicionan y jamás traicionarían , y este habla para que esa sonrisa hermosa, perfecta y soñada esté intacta, por los siglos de los siglos y amén, en el rojo de sus labios de cereza .-