Ni que encieda dosmilypico de linternas de bichito de luz puedo verte en mi noche... Puede que sean estos labios sangrando los que me hagan pensar tanto, enroscar serpientes en mis piernas y sentirme ahogada esta superficie que siento muy poco segura. Hay un lagrimeo constante de malos humores y caras fastidiosas que no dan lugar a ninguna explicación posible. Quiero gustarle a tus antojos y quiero una antología de cada momento juntos en este mundo que cada vez tiene menos credibilidad. Sería hermoso que una mariposa se te haya metido en la panza a vos también, sería hermoso poder olerte sin reclamos, sin culpa... y sin este sentirme mal que llega después, cuándo me traiciono sabiendo que no importa nada de esto. El tiempo esta pasando muy rápido, y al mismo tiempo no... y las agujas son muy lentas cuándo mis brazos extrañan. Se hace vicio recordar tu pelo revuelto y tus ojos aveces escondiendose...
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