sábado, 5 de abril de 2008

Descripción .-

Te presiento. Te diviso. Te veo. Estoy tan nerviosa. Te acercás, aunque no lo notes, me está temblando todo el cuerpo. Un beso, dos, tres, cuatro... infinitos, no puedo parar. Te acaricio, me acariciás, escalofrío. Siento la suavidad de tu piel, siento a tus manos únicas... no quiero ser cómplice de otro tacto que no sea el tuyo. Te recorro, me recorrés... nos recorremos. Ahora apoyo mi cabeza sobre tu hombro, puedo respirar en tu cuello... eso me hace cosquillas adentro. Te huelo, me encantás. La punta de tu nariz camina mis pómulos, primero uno... y después el otro, de lado a lado. Se nos cruzan las pestañas, te miro y no puedo creer tanta belleza. Me cruje el alma cuando avanzás sobre mi cuerpo -mecrujeelalma- cada una de tus vértebras le corresponde a uno de mis rincones. Nuestras piernas se anudan, busco que a cada centímetro de mí se le peguen todos los centímetros de vos. Siento tu lado más masculino y más quiero estrujarte contra mí. Mi ruta está trazada y en cada curva hay carteles con tu nombre. Adoro ver como te retorcés y me gustan mucho los movimientos de tu espalda. Aumentan mis ganas de abrazarte. Te quiero un instante todo para mí .-

No hay comentarios: